Oi oi ooooi ya está aquí La Pepa, ya está aquí el momento critiqueo politiqueo. Aún le voy a tener que seguir dando unas vueltas al nombre de mi sección.
Buenas tardes, mis queridos Tontacos Neuróticos. La verdad, es que este año, no me puedo quejar pues estoy teniendo mucho material y no sé ni por donde empezar.
Hoy, me remonto por mis segundas tierras, las barcelonesas. Han habido elecciones….sí, otra vez, pero en este caso, para las alcaldías de los municipios, y, en este caso, ha ganado el yayo Maragall, como aquí lo llamamos en la peluquería. Bueno….ganar….ganar….si no encuentra apoyos de otros partidos, no sé yo si habrá ganado o no. Colau, ha quedao segunda, y el Collboni, el del Partido Socialista de aquí Barcelona, se ha llevado el bronce, pero ha doblado en escaños, cosa que es un buen resultado para el partido.
Hasta aquí todo bien. Tenemos que la medalla de oro es para el yayo Maragall, la de plata para la activista stop desahucioJAJAJAJA desde que está de alcaldesa, se le ha olvidao esa parte pero bueno, yo a lo mío, que el bronce se lo ha llevao el Collboni. Ahora bien ¿Dónde está la trampa? Pues como bien he titulao el post, es que si Maragall quiere gobernar Barcelona y ayudar a los independentistas desde la ciudad condal, deberá intentar llegar a un acuerdo con Colau para formalizar un gobierno, pero ésta, no quiere soltar el trono de hierroDIGO el cargo de alcaldesa, así que no creo que se lo ponga nada fácil al señor Maragall. Luego, tenemos la opción un tanto entretenida, de un gobierno de coalición entre Colau y Collboni, pero pasan dos cosas, y, es que la 1) No suman los dos solos, necesitaran el apoyo de uno de los partidos no independentistas ya sea el de Valls que finalmente se puso junto a Ciudadanos, o, del PP; 2) En el primer año de mandato, en 2016, ya gobernaron juntos, y acabaron como el Rosario de la Aurora, literal, así que un milagro tiene que pasar para que Colau y Collboni dejen las asperezas a un lado, hagan las paces, y se reconcilien con la ciudadanía barcelonesa pues al menos, se lo deben.
Así pues, estamos ante una incógnita de lo que pasará durante las próximas semanas en la Ciudad Condal, si habrá gobierno, o será por segundo intento, de coalición…o, quién sabe, si no se ponen de acuerdo nuevas elecciones municipales, Dios no lo quiera.
Hagan sus apuestas señores. Se despide una vez más, La Pepa, para todos ustedes. Nos vemos en el próximo morbo político…nada, que seguiré dándole una vuelta al nombre de mi sección. ¡A más ver!
